Según estadísticas de Departamento de Extranjería y Migración entre el 2014 y 2018 el número de extranjeros en nuestro país ha aumentado el 232%, llegando a cerca de 1 millón de personas. El Ministerio de Desarrollo Social, ha estimado en 111 los migrantes en situación de calle, sin embargo nuestros hermanos de la Fundación Gente de la Calle teme que esa cifra pueda ser el doble .
En nuestras rutas en los últimos años hemos visto con preocupación como cada vez más vemos personas migrantes en la calle. Nos duele profundamente como muchas veces familias y niños llegan a vivir en situación de calle, no como una decisión sino como consecuencia de muchas veces abusos laborales, habitacionales o falta de oportunidad. En un país que en muchas esferas los rechaza y se niega a integrar. La gran mayoría de ellos, no habían vivido antes en calle.
¿ Porqué es preocupante?. Creemos que el nivel de vulnerabilidad en salud en esta población es aún mayor. La falta de documentación, el desconocimiento del funcionamiento de la red de salud, la discriminación por parte de los centros de salud y la falta de redes sociales de apoyo hacen aún más compleja la cobertura efectiva de atención médica. Cada semanas vemos más hermanos extranjeros, que no logran ser atendidos por «no estar inscritos en consultorio» o por temor a la discriminación, dejando de controlar patologías crónicas de riesgo o cuadros agudos que requieren atención médica de urgencia.
Evidentemente es un problema que como sociedad y sistema de salud debemos abordar, definir vías de integración a las diferentes modalidad de atención. Mal que mal , estemos o no estemos de acuerdo con las regulación legal de migración de nuestro país, la salud es un derecho humano universal que no podemos negar a quienes llegan a nuestro país.
Durante esta semana comenzamos a trabajar en Recoleta, con especial énfasis en trabajo con migrantes realizando atención médica y educando sobre el funcionamiento de la red de salud.
Felicitaciones, algún correo o celular para conocerlos.